La promoción de nuestro destino es de lo más extraña...

Como algunos recordaran hace un par de meses se organizó un alboroto porque Paulina Rubio fue nombrada embajadora de Quintana Roo, ella dijo que le iba a decir a todos sus amigos que vinieran y en sus presentaciones habría imágenes de nuestro bello estado; pero si la quieren ver dará un concierto en Mérida, Yucatán. Nunca hubo un evento como el que organizo su homónimo de Jalisco, Alejandro Fernandez, que realizó dos conciertos; uno en Puerto Vallarta y uno en Guadalajara.

Evento absurdos como el Festival de Cine de Cancún y Riviera Maya que no dan la proyección que necesitamos pues solo es un capricho de algún empresario local y un español que solo aquí le compran sus teatritos.

Es increíble que eventos como la entrega de Premios Telehit se vayan a Acapulco cuando podríamos traerlos a nuestro destino para mejorar la promoción.

Luego comenzó el rollo de la recuperación de playas... primero para ver quien paga el chiste, luego para que lo autorizaran, siguió la historia con los que se oponían y por ultimo el huracán que detuvo la fiesta.

Pero la gente de la OVC (Oficina de Visitantes y Convenciones) se fue de gira a una feria de turismo en Londres con nuestro excelentísimo gobernador para contarles como va la recuperación de playas.

Es cierto, la gente busca las playas de Cancún, pero no es lo único que tenemos para los visitantes; es más las playas del caribe mexicano no son las mejores del mundo. El éxito de nuestro destino es la diversidad de productos que ofrece. Ruinas arqueológicas, ecoturismo (tirolesa, ATV, etc.), parques de entretenimiento, actividades de aventura (nado con delfines, paseos a caballo, etc.), actividades acuáticas, como el buceo; vida nocturna, deportes (golf, polo, etc.), shopping, varias cosas más.

¿Entonces por que tenemos temporadas bajas cada vez más intensas y largas?

La respuesta es bien sencilla: no podemos trabajar en conjunto para hacer que nuestro destino siga siendo el “top” del turismo en México. Solo bastaría con organizarnos para poder hacer que nuestro destino recupere su presencia, pero este tipo de cosas son muy complicadas para los mexicanos.

Pero no pierdo la esperanza, quizá nosotros los usuarios más frecuentes de internet podamos hacer algo. Porque no hacer una firma digital y se la pegamos a todos los correos electrónicos que enviamos. Imaginen esto, diario enviamos emails a muchas personas, las cuales en ocasiones están fuera de Quintana Roo y que también reenvían nuestros correos. Nosotros solo agregaríamos una firma digital que invite a conocer Quintana Roo, de alguna manera impactaríamos a un buen número de usuarios de la red, ya que verían nuestro banner publicitario en cada correo. Algo sencillo que mantendría nuestra marca en la cabeza de la gente, quizá algunos lo consideren absurdo pero no hay peor lucha que la que no se hace.

Algún día me gustaría saber como se gastan el dinero los miembros de la OVC.